La revista austriaca Vangardist ha hecho honor a su nombre con su último número especial. Vanguardista como poco, sus responsables han tenido la idea de imprimirlo con una tinta en la que han mezclado sangre humana con el virus del VIH.
Vangardist ha publicado este número coincidiendo con el denominado Life Ball, uno de los mayores actos benéficos realizados en todo el mundo que precisamente tiene lugar en Viena, donde este magazine destinado al público masculino tiene su sede.
Vangardist ha impreso una edición limitada de 3.000 ejemplares de este número especial de Primavera que es muy posible se agoten rápidamente. En la cubierta de la revista se advierte claramente que ha sido impresa utilizando sangre contagiada con el virus de la inmunodeficiencia humana. Incluso se ha añadido en ella un membrete con el hashtag #HIVHeroes Edition.
La revista ha unido fuerzas con la reputada agencia de publicidad Saatchi & Saatchi para encontrar una manera de utilizar la revista para activar el debate y dar a conocer este fatídico mal contemporáneo.
Vangardist nos dan detalles sobre quiénes aportaron la sangre utilizada en la impresión de este número: un hombre gay, un heterosexual y una madre. Dieron con ellos a través de la web y amigos personales. Jason Romeyko, de Saatchi & Saatchi, la razón de esta atrevida acción de marketing:
Queríamos dar una imagen de los afectados por el VIH más allá del estereotipo gay. De ahí que la combinación de un hombre gay, un hombre heterosexual y una madre añadiera una dimensión más importante a esto.
Cada una de las palabras, líneas, imágenes y páginas de esta edición limitada de Vangardist ha sido impresa utilizando esa combinación de sangre y tinta. Han tenido que empaquetar estas 3.000 unidades en un envoltorio plástico por razones legales. Además, se ha seguido las pautas de las Universidades de Harvard e Innsbruck para asegurar que la manipulación de cada revista no produciría ningún riesgo de infección o contagio.
Romeyko dice que esta imposición legal en lo que respecta al packaging ha sido utilizada en su favor por Vangardist:
Al añadir un envoltorio transparente y autosellable añadimos un dilema moral adicional. ¿Evitas el tema debido a la ignorancia o el miedo? ¿O rompes el precinto y coges físicamente el tema (la causa y la revista) en tus manos? De esta manera acabas con el estigma y eres parte de una solución.
Vía: Deezen